DÍA DE LAS ESCRITORAS "REBELDES Y TRANSGRESORAS"
Hoy, 15 de octubre, se celebra el Día de las Escritoras. Una iniciativa de la Biblioteca Nacional de España (BNE) que comenzó en 2016 con el propósito de difundir el legado cultural de las escritoras hispanoamericanas y recordar las dificultades que, en el pasado, impidieron el desarrollo de su obra y el justo reconocimiento a su labor cultural. Establecieron como fecha el lunes más próximo a la festividad de Santa Teresa de Jesús, y este año coincide con dicha festividad.
A la BNE se unen en esta celebración la Federación Española de Mujeres Directivas, Ejecutivas, Profesionales y Empresarias (FEDEPE) y la Asociación Clásicas y Modernas (CyM), además de todas las bibliotecas, entidades e instituciones que deseen participar.
La comisaria del evento es la periodista y escritora, Joana Bonet, y el acto principal consiste en la lectura de 21 breves fragmentos de textos escritos por determinadas autoras, según el tema elegido, a cargo de personalidades de prestigio social y cultural.
El tema de este año es “Rebeldes y transgresoras” y las escritoras escogidas como representativas son la propia Teresa de Jesús (s.XVI), María de Zayas (s.XVII) Juana Manso, Rosalía de Castro, Rosario de Acuña y Filomena Dato Muruais (s.XIX) y ya pertenecientes al siglo XX: Carmen de Burgos, Delmira Agustini, Victoria Ocampo, Aurora Bertrana, Magda Donato, Sorne Unzueta Lanzeta, Ángela Figuera Aymerich, María Zambrano, Idea Vilariño, Ana María Matute, Carmen Martín Gaite, Josefina Aldecoa, Alejandra Pizarnik, Esther Tusquets y María-Mercé Marcal.
También hoy se realiza la Editatona, jornada de edición en Wikipedia para mejorar los contenidos sobre escritoras en esta enciclopedia libre.
Y después de esta breve información institucional que puedes ampliar aquí, voy a centrarme en...
María de Zayas
una escritora del Siglo de Oro de la que podría decirse que fue una de las primeras profesionales de la escritura de nuestro país. Alcanzó un éxito internacional solo superado, entre los novelistas de su época, por Cervantes, Mateo Alemán y Quevedo. Sin embargo, es una gran desconocida para la mayoría. Porque era una mujer, claro.
Y voy a aprovechar este Día de las Escritoras para hablarte un poco de su obra más importante:
Novelas amorosas y ejemplares.
De María de Zayas se sabe muy poco, solo que era de familia acomodada, hija de un capitán de infantería al servicio del conde de Lemos. Eso la llevó a vivir en distintas ciudades, como Nápoles o Zaragoza, y fue en esta última donde publicó, en 1637, la primera parte de la obra que he mencionado. Diez años más tarde y ya en Madrid, publicaría Parte segunda del sarao y entretenimiento honesto, otra recopilación de relatos, reeditados bajo el título Desengaños amorosos. También escribió, hacia 1639, una comedia La traición en la amistad, que fue elogiada por Lope de Vega.
Por qué han incluido a esta escritora entre las “Rebeldes y transgresoras” está claro en los preliminares que escribe para Novelas amorosas y ejemplares:
"porque si esta materia de que nos componemos los hombres y las mujeres, (…) si es una misma la sangre, los sentidos, las potencias y los órganos por donde se obran sus efetos son unos mismos, (…) ¿qué razón hay para que ellos sean sabios y presuman que nosotras no podemos serlo? Esto no tiene a mi parecer más respuesta que su impiedad o tiranía en encerrarnos, y no darnos maestros; (…) porque si en nuestra crianza como nos ponen el cambray en las almohadillas y los dibuxos en el bastidor, nos dieran libros y preceptores, fuéramos tan aptas para los puestos y para las cátedras como los hombres, y quizá más agudas".
©Universidad de Alicante, Banco Santander Central Hispano 1999-2000
BIBLIOTECA VIRTUAL UNIVERSAL, 2003
En la obra de María de Zayas subyace un auténtico feminismo. Critica todas las ideas de la época sobre la honra y la virtud. Esta denuncia de las limitaciones que para la mujer representaban la moral y las costumbres del siglo XVII fue reconocida por la crítica literaria del XIX, que calificó a la autora como la mayor feminista de las letras españolas. Sin embargo, el posterior puritanismo que surgió en ese mismo siglo y continuó hasta mediados del XX censuraron su obra, tildando algunas de sus novelas de «libertinas», «obscenas» o «crudas».
Novelas amorosas y ejemplares sigue el modelo de Boccaccio, en el que unos personajes se reúnen para contar historias. Los de Zayas no huyen de la peste, si no que acuden a la alcoba de una dama que ha contraído unas fiebres con el fin de entretenerla. Durante cinco noches, narran cada uno dos novelas en las que destacan la violencia y el erotismo, por lo que se ha llamado a esta obra “El Decamerón español”.
La autora reivindicó como verídicas las anécdotas en las que basó cada historia y que, a pesar de titularlas como “ejemplares” (por influencia de Cervantes) su intención no es moralizar sino mostrar a las mujeres su situación social para advertirlas y animarlas a reclamar una mayor consideración y un mejor puesto en las sociedad. Tampoco el amor es un componente tan esencial como da a entender el título, ya que el sentimiento amoroso aparece a menudo degradado.
Las diez novelas cortas que contiene la obra son historias protagonizadas por mujeres, principalmente doncellas y casadas, y alguna viuda. Todas de carácter fuerte, decididas, que manifiestan sus inquietudes y deseos, algo impensable en la novela tradicional de la época. Mujeres que luchan por el amor o para recuperar su honor, pero sobre todo, reivindican su libertad individual. No dudan en disfrazarse de hombre para conseguir su objetivo, ya que así pueden correr múltiples aventuras. Algunas tienden incluso al comportamiento violento a fin de vengarse del caballero que las ha ultrajado o maltratado. Un comportamiento que se considera justificado, pues la violencia que sufre en manos del hombre es mucho mayor.
Los personajes masculinos, incluido el galán, suelen provocar la desgracia de la dama o incluso su muerte. Son su enemigo más terrible. Pueden encarnarse en un marido celoso, un amante o amado, un padre o alguno de sus familiares.
Otros tipos de mujeres intervienen como secundarios. Son habituales las celestinas y la rival que confabula con el protagonista masculino para deshonrar a la dama o causarle la ruina social. En Zayas, muchos casos de crueldad masculina contra una mujer inocente presentan complicidad femenina.
Destaca la desenvoltura de los personajes femeninos en el aspecto sexual, algo único en la literatura del Siglo de Oro, y pongo como ejemplo a Beatriz, de El Prevenido engañado, una viuda que tiene un esclavo sexual negro encerrado en un establo. El habitual, aceptado y aplaudido papel activo del hombre en la sexualidad queda aquí anulado y se le otorga a la mujer. Una transgresión total respecto a lo que exigían la religión y la sociedad de su tiempo.
Las mujeres de Zayas salen impunes de sus actos, aunque cometan adulterio o asesinato, reclamando así la igualdad con el género masculino, que en situaciones similares era fácilmente perdonado.
Y si has llegado hasta aquí, te doy las gracias efusivamente, porque sé que el post es largo. Pero me apetecía mucho hablarte de estas Novelas amorosas que solo pude mencionar en El secreto de una dama, cuando la protagonista Claudia, que sueña con ser escritora, le cuenta a Manuel que su modelo a seguir es María de Zayas. Desde mi humilde tintero quería reivindicar a esta autora, rebelde y transgresora, a la que nunca se le ha concedido la importancia que merece en la historia de nuestra literatura.
Gracias otra vez y feliz Día de las Escritoras.